EXCUSAS O RESPONSABILIDAD
En el momento en que rendimos cuentas a alguien aportando argumentos que han apoyado nuestro proceder, no siempre somos conscientes de lo que decimos.
Releyendo el libro de Leonardo Wolk, “Coaching: el arte de soplar brasas”, recuperé para mi memoria los tipos de explicaciones que ayudan a nuestro desarrollo personal.
Hay dos tipos de “explicaciones” (que también podríamos llamar “excusas”):
1. 1. EXPLICACIONES
TRANQUILIZADORAS (o reactivas): “si no fuera por…”, “la culpa es de …”, “yo soy
así”, “la cultura de la compañía”, “la vorágine del tiempo”, “el injusto de mi
jefe”, “se cayó el sistema”, etc.
Con estas excusas nos declaramos “inocentes”, pero el problema sigue existiendo. Denotan irresponsabilidad y actuamos el rol de VÍCTIMA. Además, cierran la posibilidad de responder a una situación.
2. 2. EXPLICACIONES GENERATIVAS, son lo que contribuimos a producir; somos parte contribuyente de un resultado. Abren la posibilidad de actuar, de responder a la situación. En ellas somos PROTAGONISTAS.
Podríamos preguntarnos antes de elaborar nuestras excusas o explicaciones:
1. 1. ¿Qué
quiero que ocurra en la situación en la que me encuentro?
2. 2. ¿Cómo
puedo responder eficazmente a esta situación?
Y es que “actuamos
como somos y somos como actuamos”. La acción genera “ser”).
Rosainés Morales
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